¿Qué es el eneatipo?, ¿sirve de algo conocer mi eneatipo?, ¿qué es un eneatipo descentrado? y ¿puedo conocer mi eneatipo con un test? Todas esas preguntas te ayudarán a conocer tus luces y sombras para reconocer tu verdadera esencia.
¿Qué es el eneatipo?
El eneatipo es un número de los 9 que tiene el eneagrama. El número por sí mismo no significa nada. Es decir, el eneagrama no está relacionado con la numerología. Solo es una forma de clasificar las 9 personalidades. Por lo tanto, un eneatipo es una personalidad, un mapa mental una estructura mental y psicológica.
Existe dos teorías en relación al eneagrama, una de ellas es que todos nosotros nacemos con un eneatipo definido, incluso antes de que los primeros acontecimientos de nuestra vida nos vayan moldeando. Otra dice que nacemos con un temperamento, pero el eneatipo se va forjando a lo largo de los primeros años de vida, en función de las cirscunstacias que nos va tocando vivir. Con este eneatipo reaccionamos a las diferentes circunstancias y planteamientos que se nos presentan, de ese modo se va definiendo más y más.
El eneatipo está en nuestro día a día, también en los días malos y entonces puede llegar a acentuarse, ya no es nuestra parte más íntima, sino la superficial, el ego. El ego solo es reactivo, se adapta y busca sobrevivir, a veces de un modo algo brusco.
Cuando nuestro ego no es suficiente para mantenernos a flote, entramos en crisis, y empezamos a buscar otras formas de funcionar y de relacionarnos con el mundo. Al principio el proceso puede resultar caótico y abrumador, pero nos va a servir para conocer y «dar voz» a otras partes de nosotros que conocemos menos.
Eneatipo, alas, flechas y subtipos
Cada uno de los eneatipos tiene «asociado» otros dos por medio de las alas, los que están al lado (si eres 6, serían el 5 y el 7), y dos más con las flechas, aquellos a los que nos vamos en determinados momentos de nuestra vida, en función de nuestro estado personal y de las situaciones que vamos viviendo, estos nos llevan al centramiento o descentramiento (p.ej. el 8 puede se descentra en el 5 y se centra en el 2)
Además de alas y flechas, cada tipo tiene también un subtipo, que es la forma en la que esa forma de ser se concreta, así puedes ser:
- Subtipo conservación (más centrado en la supervivencia, el bienestar, lo material…)
- Subtipo social (lo importante son las relaciones, como te ven los demás)
- Subtipo sexual (importan más las relaciones uno a uno, mayor atracción por experiencias intensas…)
¿Para qué me sirve este conocimiento?
Muchas personas creen que conocer nuestro eneatipo nos puede encasillar. También que puede ser un engaño y que precisamente adoptaremos nuestra personalidad después de conocerlo. Pero ambas son falsas.
Un eneatipo no pretende encasillar. Todo lo contrario, solo a través del conocimiento de nosotros mismos podemos liberarnos de nuestro ego.
Nuestro ego son aquellos aspectos más drásticos que adopta nuestro eneatipo y debemos eliminarlos para llegar a nuestra esencia, a nuestra intimidad más profunda, que sigue siendo este eneatipo pero de un modo más sutil.
Por tanto, aunque siempre seguimos siendo un eneatipo debemos limar aquellos rasgos más determinantes que nos impidan fluir.
Gracias al conocimiento del eneatipo podemos identificar modelos de conducta y de pensamiento, para mejorarlos y llegar a mayor profundidad.
¿Cuántos eneatipos hay?
Hay 9 eneatipos, de ahí viene el nombre del eneagrama, de las 9 personalidades. En la imagen se pueden ver la situación de los distintos tipos y la relación entre unos y otros.
Eneatipo 1: es el conocido como el perfeccionista. El problema es que como nadie puede ser perfecto, al no conseguirlo se llenan de una rabia interna que no siempre muestran y puede perjudicarles en su salud o en sus relaciones con los demás. El punto positivo es que son ordenados, detallistas y buscan la virtud. Eso también les lleva a hablar del bien/mal como absolutos. Son algo prepotentes, dogmáticos y extremistas. Pero pueden llegar a ser muy justos y éticos.
Eneatipo 2: es la personalidad que busca ayudar a los demás. En principio parece una virtud, pero hay que preguntar siempre, ¿por qué? A menudo buscan agradecimiento y reconocimiento. Pueden tener la creencia de que son superiores a los demás en un sentido moral. Es decir, son orgullosos. No obstante, su ayuda puede ser realmente altruista en muchas ocasiones. Por otro lado, deben tener cuidado con “esperar algo a cambio”, dejar el peso en los demás y sobre todo, olvidarse de sí mismos. Son buenos consejeros y muy comprensivos.
Eneatipo 3: El tres es la productividad, el éxito y la imagen personal. Suelen ser personas preocupadas por cumplir sus objetivos, por desgracia a menudo no conocen los suyos propios y siguen los caminos dictados por la sociedad. Ese es su gran pero. Lo bueno, es que son trabajadores, luchadores y solo deben evitar su vanidad.
Eneatipo 4: el eneatipo 4 es el individualista. Son personas a las que les molestan los grupos, los pensamientos homogéneos y la mediocridad. Buscan destacar aunque no de una forma típica, no llaman la atención liderando las conversaciones, por ejemplo, solo diferenciándose del resto. Lo más negativo es que si no lo consiguen pueden caer en la envidia o centrarse demasiado en aquello de lo que carecen. Son personas creativas y empáticas.
Eneatipo 5: Buscan siempre la objetividad, son muy observadores y curiosos. Un punto negativo es que son muy avaros, tienen tendencia a acumular o problemas en desprenderse de las cosas, incluso las más insignificantes. No les gusta hablar de sus sentimientos. No obstante, en su estado más sano pueden llegar a ser muy generosos.
Eneatipo 6: Hay dos tipos de seis y los dos se relacionan con el miedo. El fóbico es la personalidad dócil y cautelosa que actúa siempre evitando emociones intensas y problemas. El seis contrafóbico en cambio, es espontáneo y agresivo, pasan a la acción y son desafiantes. En ambos casos son personas encantadoras, fieles y leales. Están llenas de inseguridades pero transmiten lo contrario.
Eneatipo 7: el 7 es la personalidad epicúrea. Son personas que buscan el placer de forma continuada en sus vidas. El problema es que pueden llegar a evitar compromisos o carecer de objetivos a largo plazo. Pero esto no ocurre siempre, los eneatipos 7 más sanos son personas que disfrutan mucho del presente, son optimistas y viven muchas aventuras sin dejar de responsabilizarse.
Eneatipo 8: el ocho es el justiciero. Siempre actúa pensando en la justicia. El problema es que reaccionan a ella de forma muy impositiva. Pueden ser excesivos, tener una personalidad fuerte y excesivamente dominante. En su aspecto más positivo son protectores y buenos líderes.
Eneatipo 9: en su lado más negativo son personas que rehúyen del conflicto, llegando a abandonar las situaciones. En cambio, en su lado más sano son muy comprensivos, dialogantes e intentan siempre adoptar el punto de vista del otro. Son serenos y equilibrados.
¿Cómo puedo saber mi eneatipo?
La mejor forma de conocer tu eneatipo es profundizar en el conocimiento de esta herramienta, leyendo la información más concreta de cada uno de ellos, que puedes ver pinchando en los enlaces de esta misma entrada.
También puedes leer libros sobre el tema, puedes empezar con algunos más básicos o profundizar con los de Claudio Naranjo. Lo ideal es participar en un grupo de autoconocimiento (como el Programa SAT) para ver todo aquello que, de forma inconsciente, queremos ocultar de nosotros mismos.
En Internet es más o menos fácil encontrar un test del eneagrama. Hay varios conocidos que pueden ser muy útiles. Estos son: el creado por Richard Riso y Russ Hudson o el test de personalidad de Personarte. Ambos tienen 35 afirmaciones y deberás valorar si te sientes más o menos identificado con ellas o si estás de acuerdo o no.
En nuestro blog puedes encontrar una recopilación de test de eneagrama más relevantes con sus características para que puedas decidir cuál quieres realizar en cada momento.
¿Tienes claro qué son los eneatipos? Si no es así no dudes en exponernos en comentarios tus dudas, para que podamos ayudarte a aclarar las dudas que tengas!